Cómo funciona un coche eléctrico y el almacenamiento de energía
La electricidad es una de las fuentes de energía más interesantes en la actualidad, tanto por su coste inferior al de los combustibles fósiles, como por su bajo impacto en el medioambiente (no produce contaminación acústica, ni humos contaminantes). El éxito de los coches eléctricos en la actualidad es un claro ejemplo del auge de este tipo de energía, y ya podemos ver como cada vez son más las personas que apuestan por este tipo de vehículos.
A continuación, veremos cómo funciona un coche eléctrico, qué son los puntos de recarga y por qué es tan importante el almacenamiento de energías para lograr la máxima autonomía de los vehículos.
Cómo funcionan los coches eléctricos
Los coches eléctricos funcionan utilizando baterías de iones de litio donde almacenan la energía eléctrica. Esta energía almacenada se utiliza para alimentar uno o varios motores eléctricos, que son los encargados de proporcionar la potencia necesaria para mover el vehículo.
Para el funcionamiento óptimo de un vehículo eléctrico son necesarios unos componentes o elementos indispensables:
- Motor eléctrico. El motor eléctrico es la base de este tipo de vehículos porque permite su funcionamiento utilizando energía eléctrica (pueden ir montados en el eje del coche o directamente sobre las ruedas).
- Batería de alta tensión. Este tipo de baterías especiales se utilizan para poder almacenar una gran cantidad de energía eléctrica que pueda dotar al motor de la potencia suficiente para realizar sus funciones.
- Inversor. Es el encargado de transformar la energía eléctrica que pasa de la batería hacia el motor. Es un elemento muy importante porque garantiza el recorrido bidireccional de la energía (de la batería al motor, pero también del motor a la batería, lo que permite una recarga de la misma).
- Puerto de carga. Es la conexión que dispone el coche para poder conectarse al punto de carga con el objetivo de obtener la energía necesaria para recargar la batería.
- Cargador de a bordo o ECU. Es el encargado de adaptar la energía almacenada en la batería de alta tensión (debe estar en corriente continua sobre una tensión de unos 400 voltios, a diferencia de la red eléctrica que es de corriente alterna de unos 230 voltios).
En los coches eléctricos también se implementan sistemas de recuperación de la energía para recargar las baterías, como sistema de frenos regenerativos.
Puntos de recarga y almacenamiento de energías
Veamos información valiosa sobre el coche eléctrico, su sistema para almacenar la energía y los puntos de recarga necesarios para su funcionamiento.
Almacenamiento de energía en los coches eléctricos
El almacenamiento y gestión de la energía en los coches eléctricos es fundamental en el éxito de este tipo de vehículos. La autonomía es clave para que un vehículo movido por un motor eléctrico pueda recorrer largas distancias, como si de un coche a combustión se tratase.
Las modernas baterías de iones de litio de alta tensión permiten almacenar suficiente energía eléctrica para garantizar, tanto que el motor eléctrico pueda proporcionar un alto nivel de potencia, como una autonomía suficiente (igual que la de un coche de combustión con el depósito lleno).
Este tipo de baterías tienen una mayor densidad de energía, una mayor eficiencia en la recarga y una vida útil más prolongada. Estas ventajas, unidas a que son más ligeras y tienen un tamaño más pequeño en comparación con otras tecnologías, las convierten en las ideales para su uso en coches eléctricos.
Puntos de recarga
Los puntos de recarga son necesarios para que el coche eléctrico pueda recargar sus baterías y así disponer de la energía necesaria para seguir circulando.
Veamos cómo utilizar los puntos de recarga.
- Lo habitual es disponer de un punto de carga propio, bien en casa o en la comunidad, para poder cargar las baterías por la noche o cuando no se esté utilizando el vehículo.
- Red de puntos de recarga. La oferta de puntos de recarga es cada vez más extensa, lo que permite que los coches eléctricos puedan desplazarse a mayor distancia. Hoy en día, la red de puntos de recarga existente permite incluso recorrer Europa con este tipo de vehículos.
- Puntos de recarga públicos. Se trata de puntos de recarga que ofrecen ayuntamientos, centros comerciales, parkings y similares, donde los ciudadanos o clientes pueden cargar sus vehículos eléctricos, y que ayudan a proporcionar una mayor cobertura a la movilidad eléctrica.
Hemos hablado sobre los coches eléctricos, qué son y cómo funciona un coche eléctrico, además de otros temas relacionados de gran importancia como el almacenamiento de energía y los puntos de recarga.
En un mercado que apuesta por las energías verdes y renovables, los coches eléctricos son una de las mejores soluciones, pues no contaminan, funcionan con energía eléctrica que tienen un coste inferior al de los combustibles fósiles y su desarrollo está en el punto álgido que permite su compra a cualquier usuario.